Esterilización: ¿sí o no?
La decisión de esterilizar a nuestras queridas mascotas a menudo genera incertidumbre y preocupación. Sin embargo, es un tema crucial que afecta no solo a los animales de compañía, sino también a la sociedad en general.
En este artículo, exploraremos las preguntas más comunes que surgen en torno a esta intervención quirúrgica y los posibles pros y contras asociados para brindarte una comprensión más clara.
Como dice Jack es destripador: ¡vayamos por partes!
Pero, entonces, ¿cuáles son los riesgos de esterilizar?
El temor principal al considerar la esterilización es la intervención quirúrgica y la anestesia general. A pesar de estas preocupaciones, los datos revelan una tasa de mortalidad baja, con estudios recientes indicando un 0.64%. Este porcentaje tranquilizador se atribuye al profesionalismo de los cirujanos y anestesistas veterinarios.
Existen algunos falsos mitos en torno a la esterilización, como la pérdida de vitalidad en los animales o la creencia de que las hembras deben dar a luz al menos una vez en la vida. Sin embargo, ninguna de estas afirmaciones cuenta con respaldo científico sólido.
Beneficios de esterilizar
Para machos:
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Mejora del temperamento en animales agresivos, como la agresión territorial.
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Reducción o eliminación de comportamientos de marcaje.
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Disminución de las fugas y, por ende, de pérdidas de perros y accidentes no deseados.
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Prevención de tumores testiculares.
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Reducción de la incidencia de tumores prostáticos y hiperplasia prostática benigna en machos criptórquidos.
Para hembras:
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Evitar camadas no deseadas.
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Reducción de la incidencia de tumores mamarios, siendo menor si la castración se realiza antes del primer celo.
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Prevención de patologías uterinas como tumores o piómetras.
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Evitar la aparición de pseudogestaciones.
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Control de enfermedades como la diabetes canina, que pueden descompensarse durante el celo.
Contras de esterilizar
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Período de recuperación necesario durante el cual, tu mascota puede experimentar malestar y necesitar cuidados especiales.
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Cambios de comportamiento: algunos dueños de mascotas informan cambios en el comportamiento de sus animales después de la esterilización, como la pérdida de vitalidad o, en casos raros, una mayor apatía. No obstante, no se ha demostrado una correlación directa entre estos dos factores.
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Posible incremento de peso: después de la esterilización, algunas mascotas pueden experimentar un aumento en el apetito y una disminución en el metabolismo, lo que podría llevar a un aumento de peso si no se ajusta la dieta y el ejercicio.
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Mitigación de instintos naturales: La esterilización puede reducir ciertos comportamientos naturales como el marcaje en machos o el celo en hembras. Algunos propietarios pueden considerar estos comportamientos como parte integral del carácter de su mascota.
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Riesgos asociados con la cirugía: aunque la tasa de complicaciones es baja, toda cirugía conlleva riesgos, como infección o problemas de cicatrización.
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Coste económico: la esterilización puede tener un coste financiero menor o mayor en función del tamaño/peso del perro.
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Es irreversibles. La esterilización es una decisión permanente, y algunos dueños pueden sentir que están tomando una decisión definitiva en cuanto a la reproducción de su mascota.
Es importante señalar que estos puntos no aplican universalmente a todas las mascotas, y muchos de los posibles inconvenientes pueden gestionarse adecuadamente con el cuidado y la atención necesarias. Además, los beneficios de la esterilización, como la prevención de enfermedades y la reducción del número de animales abandonados, son factores significativos a tener en cuenta. Antes de tomar cualquier decisión, es recomendable discutir detenidamente con un veterinario para comprender completamente los riesgos y beneficios en el contexto específico de tu mascota.
Conclusión
En resumen, la esterilización no sólo es una práctica responsable que no solo beneficia a los animales individualmente, sino que también tiene un impacto positivo en la sociedad y en el bienestar general de nuestras mascotas. Contribuye de manera significativa a la creación de comunidades más saludables y compasivas. Es una forma efectiva de abordar problemas de superpoblación y mejorar la calidad de vida de nuestras queridas mascotas.
No obstante, cada animal es un mundo y cada caso único, así que nuestra recomendación es siempre consultar a vuestra veterinaria.